El Camino Francés es la ruta más famosa, importante y tradicional del mundo jacobeo. Su gran popularidad entre los peregrinos a lo largo de los siglos ha hecho de él una vía cultural, artística y social por la que transitan más de 5 de cada 10 peregrinos que se dirigen a Santiago, por encima de otros itinerarios como el Camino Portugués, el Camino Inglés o el Camino del Norte. Tal es su importancia que ha sido catalogado Patrimonio de la Humanidad, además de primera Itinerario Cultural Europeo (ICE) en ser declarado y Premio Príncipe de Asturias de la Concordia.
Etapas
33
Inicio
St. Jean Pied de Port
Longitud
764 km
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El Camino Francés empieza en St. Jean Pied de Port, en Francia. Muchos peregrinos optan por salir desde Roncesvalles para evitar el famoso alto de Lepoeder, situado a más de 1.400 metros de altura.
El Camino Francés tiene una distancia de 764 kilómetros divididos en 33 etapas. Disfrutarás del interior de España en tu camino hacia Santiago de Compostela. Conocerás el Aragón, Navarra, La Rioja, Castilla y León y Galicia.
Nosotros te recomendamos que hagas el Camino Francés entero desde Roncesvalles o Saint Jean Pied de Port. Sin embargo, no todo el mundo tiene varias semanas o un mes para hacer su peregrinaje. Por eso, si tu objetivo es conseguir el certificado de la Compostela, deberás realizar el Camino Francés por lo menos los últimos 100 kilómetros de la ruta, lo que te llevará a salir desde Sarria, clásico punto de partida del Camino Francés. Si vas a recorrerlo en bicicleta, entonces será necesario completar 200 kilómetros, teniendo que comenzar el Camino en la ciudad leonesa de Ponferrada.
El itinerario jacobeo francés dispone a lo largo de sus casi 800 kilómetros de una gama de servicios de lo más completo, con una gran red de albergues y una correcta señalización. Es por ello que, pese a ser uno de los caminos más largos, resulta la ruta ideal para empezar a descubrir el Camino de Santiago. Y es que el recorrido merece mucho la pena, permitiendo al peregrino descubrir el norte de España en 33 etapas en un viaje que hay que hacer al menos una vez en la vida.
Tradicionalmente, existen dos puntos de inicio preferidos por los peregrinos: Saint Jean Pied de Port y Roncesvalles. Sin embargo, muchos deciden comenzar el Camino de Santiago desde esta última localidad para evitar subir el alto de Lepoeder, situado a más de 1.400 metros de altura.
El Camino de Santiago Francés es uno de las más largas rutas jacobeas existentes. El itinerario está formado por un total de 33 etapas que cubren una distancia total de 764 km. La ruta del Camino Francés comienza en la encantadora localidad gala de Saint Jean Pied de Port y finaliza junto a la tumba del Apóstol, en Santiago de Compostela. En caso de realizar la ruta jacobea francesa en bicicleta, entonces las etapas a completar serán 14.
El itinerario jacobeo francés puede hacerse durante todo el año. Sin embargo, aunque los albergues públicos están abiertos todo el año, otros de carácter privado cierran en las épocas de menor afluencia. Así, dependiendo de la época del año que elijas, encontrarás más o menos servicios disponibles, además de una mayor o menor masificación. A continuación, te contamos todo lo que debes saber para elegir la época del año cuando peregrinar.
Algunos peregrinos optan por hacer el Camino Francés en primavera, cuando se puede disfrutar de temperaturas frescas, a cambio de un tiempo más inestable, en el que no son raras las lluvias. El verano por su parte, es la época más popular por diversos motivos. Además de por las condiciones climáticas, por ser cuando se celebra la festividad de Santiago Apóstol, el 25 de julio. Eso sí, si decides hacerlo durante el período estival, deberás tener en cuenta la gran masificación existente, además de ir preparado para las duras y sofocantes etapas de la meseta castellana.
Son también varios los romeros que optan por caminar a Santiago en otoño, cuando el paisaje se tiñe de los más diversos colores y deja imágenes de postal. Sin duda, una época perfecta para hacer el Camino Francés, aunque tendrás que luchar con la variabilidad del tiempo. Por último, los peregrinos que deciden hacer el Camino en invierno, algunos más de los que se podría pensar en un principio, tienen la ventaja de encontrar un itinerario poco concurrido, además de impresionantes paisajes invernales.
Según los datos de la Oficina del Peregrino de Santiago de Compostela, en el año 2019 completaron el Camino Francés 76.774 romeros, más del 55% del total. Se confirma un año más su dominio sobre el resto de rutas jacobeas, aunque perdiendo algo de fuelle respecto a otros itinerarios. Hay que tener en cuenta que estos datos sólo reflejan los peregrinos que recogen la Compostela, sin contabilizar a los que hacen el Camino, pero no solicitan el certificado.
A lo largo de los 764 kilómetros que componen la ruta jacobea francesa son muchos los paisajes en los que se puede recrear el caminante, producto de su rico patrimonio cultural y sus paisajes. Empezando en Saint Jean Pied Port y las tierras navarras, que dan la bienvenida al peregrino con su impresionante escenario pirenaico, pasando por las solitarias llanuras de la Meseta, los preciosos viñedos de La Rioja o las postales rurales de tierras gallegas. Además, el Camino Francés discurre por alguno de los pueblos y ciudades más bellas del norte de la Península como Burgos, Puente la Reina, León, Pamplona, Santo Domingo de la Calzada, Astorga, O Cebreiro o Portomarín.