La etapa entre Castrojeriz y Frómista del Camino Francés es perfecta para aquellos peregrinos que gusten del silencio, la soledad y las llanuras infinitas. El mayor reto del día se encuentra entre Castrojeriz y: la dura subida al Alto de Mostelares, lugar clásico de la ruta jacobea, no tanto por su dureza sino por el espectacular paisaje que verá el peregrino al coronarlo. A partir de aquí, se abre una inmensa llanura, en la que encontraremos bonitos pueblos como Ítero de la Vega o Boadilla del Camino. La última parada, Frómista, es una localidad clásica del camino que recibe a los romeros con los brazos abiertos.
Etapa
15
Longitud
24,7 Km
Dificultad
Media
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La única dificultad orográfica de la etapa entre Castrojeriz y Frómista del Camino de Santiago es el duro ascenso al teso de Mostelares, a la salida de Castrojeriz. La subida será de casi 150 metros en 1,7 kilómetros y sin apenas zonas de sombra. Todo un reto para el peregrino que, sin embargo, después caminará por terreno prácticamente llano el resto de la etapa.
Nuevamente, es importante destacar que nuevamente, el calor en verano y el frío en invierno, serán también incómodos compañeros de etapa.
En la etapa entre Castrojeriz- Frómista del Camino Francés, nos encontramos a medio camino entre Burgos y Palencia, una zona de España con diversos atractivos, producto de su gran historia. En cuanto a la gastronomía, en los restaurantes que encontrarás en la etapa podrás probar platos de la cocina local como el pichón o el lechazo. En Frómista también es muy típica la menestra de verduras, elaborada con un sofrito de magro de cerdo, ternera y cebolla. La morcilla y los embutidos palentinos también son muy apreciados, así como las clásicas galletas campurrianas y los sequillos.
También merece la pena visitar el Museo del Queso de Frómista donde, podremos ver el proceso artesano de producción del queso de oveja y degustar o comprar este delicioso manjar, alrededor del cual se celebra una feria anual.
En el apartado cultural, el mayor punto de interés se encuentra en Frómista, con las bonitas iglesias de San Martín y San Pedro, de estilo románico y gótico, respectivamente.
En la etapa Castrojeriz – Frómista del Camino Francés. tras dejar Castrojeriz atrás, emprenderemos la subida a Mostelares, una fuerte y larga ascensión que recompensará el esfuerzo con unas vistas increíbles. Y es que podremos contemplar una meseta sin fin frente a nosotros. Después nos adentraremos en la comarca de Tierra de Campos, una tierra orgullosa de sus campos de cereal y de su maravilloso patrimonio histórico-artístico. La última parada del día en la bella Frómista, nos descubrirá un pueblo muy vinculado con el Camino de Santiago, con monumentos como la iglesia de San Martín, uno de los templos románicos mejor conservados y completos de toda Europa.
