En la etapa entre O Pedrouzo y Santiago de Compostela del Camino de Santiago es de mucha emoción. Y es que todos los peregrinos desean alcanzar la majestuosa plaza del Obradoiro para verse recompensados. Por delante queda una etapa corta y sencilla, con pendientes muy asequibles y un terreno en buen estado. Menos el tramo de bosque inicial a la salida de O Pedrouzo, caminaremos por una zona sometida a bastante presión urbanística, como la mayoría de periferias urbanas. Atravesaremos el aeropuerto compostelano, zonas residenciales, vías de alta capacidad y áreas industriales. Sin embargo, con solo poner un pie en la «Zona Vella» de Santiago, la magia se apoderará de nosotros hasta llegar al destino fijado hace muchos días: la catedral.
Etapa
33
Longitud
19,4 Km
Dificultad
Media
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La etapa final entre O Pedrouzo y Santiago de Compostela es, sin duda, la etapa más mágica todo el Camino Francés. No obstante, estamos ya muy cerca del destino final, por lo que muchos peregrinos, llevados por la ilusión, ya no notan tanto el cansancio. Además, el recorrido no presenta grandes dificultades, si acaso la casi imperceptible subida al Monte do Gozo. Los peregrinos en bicicleta y las personas con movilidad reducida están de enhorabuena, pues más allá de algunos tramos dificultosos, podrán hacer la mayoría de la etapa hasta la llegada a Santiago.
La etapa entre O Pedrouzo y Santiago de Compostela del Camino Francés es de mucha emoción porque llegamos a Santiago de Compostela, una de las ciudades más bonitas e interesantes de toda España. Una ciudad llena de historia y que es visitada cada año por cientos de miles de turistas que vienen a descubrir sus atractivos.
En cuanto al apartado gastronómico, Santiago es conocida por sus afamados restaurantes del casco antiguo, que sirven pescados y mariscos de excelente calidad, así como el famoso pulpo a la gallega o el «pulpo á feira». Galicia es tierra de buenas carnes, como la Ternera Gallega o la carne de cerdo celta. Destacan elaboraciones como el cocido gallego, el lacón con grelos y raciones como la zorza, el raxo o la richada. Tampoco te deberías perder los pimientos de Padrón o la tortilla, elaborada con patatas gallegas, famosas por su sabor. Todo ello convenientemente acompañado de vinos como el albariño, mencía o ribeiro. Y de postre no te olvides de la típica tarta de Santiago, así como de hacer la digestión con un trago de «queimada».
En cuanto al apartado cultural, nos encontramos con una de las ciudades más interesantes de España, con un casco histórico de los mejor conservados de Europa. La conocida Catedral de Santiago, monumental por los cuatro costados, alberga el Pórtico de la Gloria, del siglo XII y obra maestra del románico. También merece la pena la Praza de Abastos, el segundo lugar más visitado de la ciudad o una visita a los diversos monasterios compostelanos, aún en activo.
Santiago destaca también por sus numerosas zonas verdes. En este sentido podremos visitar la alameda compostelana, un histórico jardín de aires decimonónicos que nos tendrá guardadas varias sorpresas, pero también el romántico Parque de Bonaval o la carballeira de Santa Susana. Tampoco te olvides de la visita al Museo Galego de Arte Contemporáneo o el Museo do Pobo Galego, donde podrás conocer un poco más sobre las tradiciones, costumbres y vida antigua de los gallegos.
Por último, la capital de Galicia también conocida por ser una ciudad universitaria con un destacado ambiente. En los bares y pubs nocturnos de la zona vieja, muchos de ellos emplazados en históricos edificios, podrás tomar brebajes «moi galegos» como el licor café, el licor de hierbas o la crema de orujo.
La etapa entre o Pedrouzo y Santiago de Compostela del Camino Francés no presentará grandes dificultades. Saldremos de O Pedrouzo hasta llegar a Lavacolla, donde los peregrinos de antaño se lavaban antes de llegar a Santiago de Compostela. Después, llega el Monte do Gozo, un pequeño promontorio desde donde ya se ven las torres de la catedral. El camino accede a la ciudad por el barrio de San Lázaro y tras recorrer la avenida do Camiño Francés nos llevará al casco antiguo compostelano, donde ya solo quedarán unos pocos pasos para llegar a la Plaza del Obradoiro para ver recompensados todos los esfuerzos realizados.
