La trigésima etapa entre Portomarín y Palas de Rei del Camino Francés será una continuación del día anterior. Caminaremos por pistas de asfalto, atravesando zonas rurales y descubriendo pequeñas aldeas del interior de Lugo. Si bien los desniveles serán bastante moderados, la primera mitad de la etapa puede llegar a cargar sobremanera las piernas, pues ascenderemos desde 350 a más de 700 metros de altura. El exceso de alquitrán y cemento se verá recompensado por los bonitos parajes que atravesaremos y la magia de lugares como el cruceiro de Os Lameiros, los yacimientos del castro de Castromaior o las diversas iglesias románicas emplazadas a pie de camino.
Etapa
30
Longitud
24,8 Km
Dificultad
Media
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La etapa entre Portomarín y Palas de Rei del Camino de Santiago no tiene grandes dificultades. Partiendo desde Portomarín, el único escollo será el desnivel de 335 metros hasta la cima de la Sierra de Ligonde, aunque se supera con facilidad, ya que sólo hay una cuesta empinada a la salida de Castromaior. A partir de aquí hasta Palas de Rei la ruta será un continuo sube y baja, algo muy típico de Galicia.
Tanto los peregrinos en bicicleta como las personas con movilidad reducida podrán afrontar la etapa sin problema, aunque podrían encontrarse con dificultades en el ascenso por la ladera del monte San Antonio o antes de llegar a Hospital de la Cruz.
En la etapa entre Portomarín y Palas de Rei del Camino Francés comenzaremos a adentrarnos en un de las zonas queseras más clásicas de Galicia. En muchas de las poblaciones que atravesaremos se elabora el afamado queso Arzúa-Ulloa. Se trata de un queso de pasta blanda de leche de vaca de sabor suave que suele comerse solo, en ensaladas o como postre acompañado de dulce de membrillo. Asimismo, en los restaurantes podemos saborear los platos típicos de las anteriores etapas, como el cocido gallego, el lacón con grelos, las empanadas, el pulpo a la gallega. Tampoco te olvides que en Galicia se hacen un pan maravilloso, que podrás encontrar en la mayoría de panaderías tradicionales.
Y para acompañar todo, no te olvides de los excelentes vinos con Denominación de Origen como el Albariño, el Ribeiro o Valdeorras. Y no te vayas sin degustar el licor café. ¡Todo el que prueba repite!
La etapa entre Portomarín y Palas de Rei del Camino Francés se encuentra dividida por la sierra de Ligonde, frontera natural entre las cuencas de los ríos Miño y Ulloa. A priori, se trata de una etapa sin grandes complicaciones. Eso sí, pese a que el comienzo pueda parecer sencillo en el inicial ascenso al monte San Antonio, en algunos tramos tendremos que afrontar pequeños repechos que pueden atragantarse.
