La etapa entre Grijó y Oporto del Camino Portugués central es una etapa corta y de transición para los peregrinos que hayan pernoctado en Grijó. Porto, ciudad Patrimonio de la Humanidad, nos dará la bienvenida cruzando el espectacular puente de D. Luís I sobre el río Douro. Te recomendamos reservar al menos un par de días para descubrir todos los secretos de su casco antiguo.
Etapa
14
Longitud
15,1 Km
Dificultad
Media
Pulsa sobre la imagen para visualizar el perfil con zoom
La etapa entre Grijó y Porto del Camino de Santiago es una etapa muy tranquila y cómoda. Ni la longitud ni la orografía serán un problema, pese a encontrarnos con algunas subidas y bajadas que, a estas alturas del camino, no deberían resultar difíciles para los romeros.
Como en el resto de grandes ciudades merece la pena descansar un día y quedarse una noche más para poder conocer los lugares más interesantes y disfrutar de la experiencia.
Esta etapa del Camino de Santiago no debería suponer dificultades añadidas, ni para bicigrinos ni para peregrinos con movilidad reducida.
Porto, ciudad Patrimonio de la Humanidad, bien merece aprovechar la estancia y quedarse un par de días para perderse por sus barrios y callejuelas, descender hasta la Ribeira, ver las barcazas del Douro o maravillarse con Gaia y sus bodegas de Vinho do Porto.
Si decides quedarte a descubrir la ciudad te recomendamos visitar la Sé o Catedral de Porto, datada del siglo XII y que constituye el monumento religioso más importante de la ciudad. También te recomendamos la impresionante estación de tren de São Bento y la subida a la Torre dos Clérigos, cuyos 80 metros de altura te permitirán tener una de las mejores panorámicas de la ciudad.
Pero si algo destaca son los puentes, que han hecho que la ciudad sea conocida como la ciudad de los puentes. No pierdas la oportunidad de contemplar el precioso paisaje del puente Luis I. Los aficionados a la arquitectura también encontrarán interesantes los demás viaductos portuenses.
Además, aquí los aficionados al vino se encuentran de enhorabuena. Y es que en la ribera izquierda del Duero se encuentran los principales almacenes de vino de Oporto. Una buena oportunidad para ver las barcas (rabelos) utilizadas para llevar las barricas río abajo. Existe la posibilidad de visitar las bodegas y hacer degustaciones incluida, donde nos explicarán la interesante historia del delicioso vino dulce de Porto, creado en el siglo XVII por y para británicos.
En cuanto al apartado gastronómico, el Bacalhau, como en todo el país luso es el plato estrella. Aquí encontrarás todas las recetas que habrás probado en anteriores etapas del Camino Portugués, pero también una muy local: el Bacalhau à Gomes de Sá, que lleva el nombre de su creador.
Asimismo, no deberías perderte otros platos locales como las tripas á moda do Porto, muy similares a los callos españoles; la linguiça o el pulpo. Si eres más de comida rápida, puedes decidirte por una francesinha de Porto. Para el postre, hay opciones de sobra: bolos de arroz, queijadas, ovos moles, etc.
La etapa entre Grijó y Oporto es una de las etapas más emblemáticas del Camino Portugués. Y es que pese a su escasa longitud el recorrido nos llevará por bonitos lugares. Destacan un tramo de la antigua calzada romana vía XVI del Itinerario Antonino, envuelta por muros de piedra y flanqueada por un bosque de alcornoques y eucaliptos o, el mejor momento de la jornada: la entrada a Porto, que nos dejará un escenario de postal difícil de olvidar.
