La etapa entre Güemes y Santander es una etapa corta y sencilla que nos llevará a la tercera gran ciudad del Camino del Norte: Santander. De nuevo, saliendo de Güemes, nos encontramos con varias alternativas para llegar al destino final. Primero deberemos elegir si seguir el camino oficial, más corto y anodino, pues discurre paralelo a una carretera o tomar la variante que da un rodeo por Galizano y Loredo, mucho más bella paisajísticamente. Una vez llegados a Somo, será necesario coger el barco para cruzar la bahía y llegar a Santander.
Etapa
12
Longitud
11,8 Km
Dificultad
Baja
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La etapa entre Güemes y Santander del Camino del norte, más allá del paso en barco por la bahía de Santander y las diferentes variantes que hemos mencionado, no presenta dificultades reseñables, ya que discurre por terreno llano en casi su totalidad. Es por ello que los peregrinos y las personas con movilidad reducida no encontrarán complicaciones para completar el recorrido.
Hoy llegamos a Santander, situada en una de las bahías más bonitas del mundo. Una ciudad que se deja disfrutar y con numerosos atractivos por explorar. Entre los monumentos religiosos destacan la iglesia del Cristo, la iglesia de Santa Lucía, la iglesia de la Anunciación, la iglesia de San Francisco y, por supuesto, la catedral de Santander, construida entre finales del siglo XII y el XIV.
Además, la ciudad cántabra también ofrece una extensa oferta cultural patente en espacios como el Museo de Arte Moderno, el Museo del Agua o el Museo Marítimo del Cantábrico. Asimismo, no te puedes perder lugares emblemáticos de la ciudad como la Plaza Porticada, la plaza de Pombo, con la característica arquitectura de sus edificios, los Jardines de Pereda y el conjunto formado por el palacio y los jardines de La Magdalena.
En el apartado gastronómico, estamos en un lugar ideal, pues Santander es conocida por lo bien que da de comer a los turistas. Los protagonistas, como en las anteriores etapas son los mariscos y pescados como la lubina, la merluza, el lenguado, el bacalao, etc. Sigue siendo obligado probar también las anchoas y también degustar los diversos quesos de la región, como los quesos de Liébana, el Queso de Cantabria y el queso Picón Bejes-Tresviso, todos ellos con Denominación de Origen. Para poner la nota dulce hay variedad, desde sobaos pasiegos pasando por quesada o las famosas corbatas de Unquera.
En esta duodécima etapa entre Güemes y Santander del Camino del norte cambiaremos los verdes prados montañeses y los abruptos acantilados de la merindad de Trasmiera por la preciosa bahía de Santander, con la playa del Sardinero como protagonista. Los peregrinos que ya conozcan capital cántabra pueden optar por alargar la etapa hasta localidades como Bezana o Boo de Piélagos, aunque, a decir verdad, una visita a Santander siempre merece la pena.
