Comillas, una encantadora villa modernista en el norte de España
La localidad de Comillas podría ser uno más de los encantadores lugares que visitar en Cantabria de no ser por Antonio López y López, Marqués de Comillas. Y es que este ilustre personaje fue el responsable de transformar esta villa marinera en toda una exaltación del modernismo.
Hablamos de un auténtico museo al aire libre, declarado Conjunto Histórico Artístico y formado por deslumbrantes edificios firmados por los más célebres arquitectos modernistas de la época. Domenech, Martorell e incluso el mismísimo Antoni Gaudí, diseñaron edificios y monumentos que en la actualidad atraen a curiosos y turistas de todo el mundo.
Comillas es, desde luego, un auténtico despliegue de la genialidad y el talento de la época del que hoy venimos a hablarte.
Comillas, la fantasía modernista de un acaudalado Marqués
Comillas es, sin duda un lugar singular que destaca por sus edificios medievales y barrocos. Esta localidad, situada en la Comarca de la Costa Occidental de Cantabria, muy cerca de San Vicente de la Barquera, tiene más patrimonio arquitectónico que muchas ciudades y capitales de provincia. No obstante, es después de Barcelona y Reus, la tercera ciudad modernista más importante de España.
En esta villa han veraneado reyes y han vivido o pasado largos períodos de tiempo numerosos nobles, indianos y personalidades importantes de la época.
En la segunda mitad del siglo XX, Comillas empezó a posicionarse como un incipiente destino de turismo de «baños de ola», que atrajo a numerosos veraneantes españoles y extranjeros. Sin embargo, no fue hasta la llegada de Antonio López, nacido en la villa y enriquecido en Cuba, cuando experimentó la explosión definitiva que la convirtió en el destino de moda.
Todo comenzó cuando el Marqués consiguió que en el verano de 1881 el mismísimo rey Alfonso XII decidiese pasar sus vacaciones de verano en la villa. A partir de este momento, las sucesivas visitas reales a Comillas atrajeron la atención de la aristocracia y la alta burguesía que deseaban estar próximos a la corte. Así se explica que un pequeño pueblo marinero pasase a ser frecuentado por la alta alcurnia y se convirtiese en el lugar de ensayo del Modernismo.
¿Qué ver en Comillas? Descubre un paraíso de la arquitectura modernista
Antes de explicarte los lugares más interesantes que ver en Comillas, debemos aclarar que, pese a su importancia arquitectónica, es una villa pequeña, por lo que puedes caminar de un lugar a otro perfectamente. Y es que este es, sin duda, uno de sus grandes encantos, ya que es totalmente recomendable pasear por la villa mientras vamos descubriendo sus edificios más emblemáticos.
Aunque Comillas dispone de un amplio patrimonio modernista, existen tres edificios que se han convertido en las estrellas de su ruta modernista y los culpables de que miles de turistas se acerquen a la localidad año tras año.
El Palacio de Sobrellano, una vivienda veraniega en Comillas
Este palacio, datado del año 1888, es la vivienda veraniega que el Primer Marqués de Comillas hizo construir sobre su antigua casa. Este imponente edificio fue diseñado por el arquitecto Joan Martorell en un estilo muy ecléctico que no deja indiferente a nadie.
El Palacio de Sobrellano destaca tanto por su exterior como por su interior. En su exterior, impresiona la fachada neogótico-modernista inspirada en los palacios de Venecia, con preciosos relieves y vidrieras más propios de una catedral que de un palacio. En su interior, sobresalen sus imponentes estancias, siendo dignas de mención la gran escalinata central de mármol, el salón del billar y, principalmente, el gran salón del trono.
Junto al palacio también puede visitarse la hermosa capilla-panteón de estilo gótico donde descansan los restos de miembros de la familia. En su interior destaca la presencia de mobiliario de Gaudí, principalmente los bancos y el confesionario, además de diversas esculturas modernistas de artistas de la época. El exterior del palacio, la capilla y los jardines se pueden ver gratis y por libre, pero a su interior solo es posible entrar con una visita guiada.
El Capricho de Gaudí, el gran emblema de Comillas
Quizás no sea el edificio más notable de la villa, pero sin embargo se ha convertido en el gran emblema de Comillas. Al fin y al cabo, tener una obra de Antonio Gaudí no es algo de lo que puedan presumir muchas ciudades. Lo cierto es que El Capricho de Gaudí fue proyectado por el arquitecto catalán, pero nunca estuvo presente durante su construcción, dejándola a cargo de un compañero de carrera, Cristóbal Cascante.
El Capricho, también conocido como Villa Quijano, fue el «capricho» (nunca mejor dicho) del concuñado del Marqués de Comillas, Máximo Díaz de Quijano, que decidió construir su residencia de verano empujado por la popularidad de la villa entre las clases altas. Se trata de uno de los tres edificios que Gaudí diseñó fuera de Cataluña, o lo que es lo mismo, una joya arquitectónica en la que admirar el desbordante ingenio del arquitecto catalán.
Esta vivienda siempre ha sido una propiedad privada, pasando primeramente a los herederos de Díaz de Quijano y siendo comprada después por unos empresarios hicieron de ella un restaurante de lujo. Desde el año 2010, después de ser adquirida por una institución cultural privada, el edificio ha abierto sus puertas al público, permitiendo visitarlo tanto por dentro como por fuera.
Universidad Pontificia de Comillas
Este imponente edificio da buena idea de la importancia tanto económica como cultural de Comillas a finales del siglo XIX. La Universidad de Comillas es una de las escuelas de negocios más importantes de España, actualmente en Madrid, pero fundada por los Jesuitas en esta pequeña localidad. Para muchos, esta universidad es una de las más bonitas del mundo, destacando por el fabuloso prodigioso diseño exterior neogótico-mudéjar de Joan Martorell i Monells.
El conjunto destaca por el enorme edificio del Seminario Mayor, diseñado por el aclamado Lluís Domènech i Montaner, también autor del Hospital de Sant Pau de Barcelona. El arquitecto catalán aportó su ingenio decorando algunas zonas del edificio como el paraninfo, el vestíbulo, la escalera o los mosaicos.
Aunque el Marqués de Comillas ordenó construir el edificio para albergar un centro docente, acabaría usándose como seminario y, más tarde, en 1904, sería catalogado como Universidad Pontificia. Este histórico edificio pertenece ahora a la Fundación Comillas que organiza visitas guiadas gracias a las cuales podrás descubrir toda la historia que atesoran estos edificios.
Otros atractivos de Comillas que no puedes perderte
Aunque estos tres edificios puedan parecerte bastante, no creas que en Comillas no hay nada más que ver. La localidad destaca por el modernismo, pero también ofrece otros atractivos, modernistas y no modernistas. Lo mejor es lanzarse a pasear por las calles adoquinadas de su casco viejo y disfrutar de su desbordante historia.
Totalmente recomendable en Comillas es la visita al cementerio modernista, custodiado por un Ángel Guardián en lo más alto. De nuevo, Lluís Domenéch i Montaner fue el encargado de transformar las ruinas góticas del antiguo cementerio y dotarlas de un aire modernista, diseñando varios mausoleos de familias nobles de la época.
Otro imprescindible en una visita a Comillas es la Fuente de los Tres Caños, mandada construir por orden del primer Marqués de Comilllas en honor a Joaquín del Piélago y también obra de Doménech i Montaner.
También te recomendamos la visita a la Casa Ocejo, habitual residencia de la madre del Marqués de Comillas y también la vivienda donde se alojó el Rey Alfonso XII en las varias ocasiones que descansó en la villa.
¿Quieres más? No te pierdas la Puerta de Moro o Puerta de los Pájaros, una puerta de cochera del año 1900 firmada por Gaudí, la Plaza de la Constitución, con su antiguo ayuntamiento del siglo XVIII y sus casonas montañesas, o, el Palacio ducal de Almodóvar del Río, cuyo aspecto gótico inglés parece sacado, literalmente, de un cuento de hadas.
¿Qué hacer cerca de Comillas?
Tanto Comillas como la mayoría de pueblos de esta zona de la costa de Cantabria ofrecen innumerables atractivos por los que merece la pena hacer una escapada.
Si estás pensando en pasar unos días por esta zona te recomendamos que planifiques tu viaje con antelación y mires todas las opciones de hoteles de Comillas. Y es que esta turística localidad recibe muchos turistas, por lo que es conveniente reservar con tiempo. Desde esta ilustre villa tendrás un buen punto de inicio para visitar atractivos cercanos como la playa de Oyambre, el Bosque de Secuoyas de Cabezón de la Sal o aprovechar tu ruta para visitar el precioso entorno de Santillana del Mar y la historia de la Cueva de Altamira.
¿Cómo llegar a Comillas?
Comillas es una villa muy bien comunicada por la que pasa muy cerca la Autovía del Cantábrico. De esta forma, es posible llegar directamente al pueblo recorriendo la autovía A-8 que une Santander y Oviedo y desviándose en la salida 249 con indicaciones de Comillas. Si lo tuyo es conducir a la vez que descubres encantadores pueblos, te recomendamos entonces acceder por la carretera CA-131, que discurre por pueblos como San Vicente de la Barquera, Santillana del Mar o Suances.
Una vez a tu llegada a Comillas, te recomendamos aparcar cerca de la playa, en el Parque de Sobrellano o en las inmediaciones del Polideportivo Municipal.