Chorreras de Despeñalagua: descubre un paraíso natural en Guadalajara
Conocer las Chorreras de Despeñalagua es uno de los imprescindibles que hacer en cualquier visita al bello pueblo de Valverde de los Arroyos, uno de los más interesantes de la Ruta de los Pueblos Negros de Guadalajara. Sobre todo, teniendo en cuenta que este excepcional conjunto de cascadas de más de cien metros de altura a los pies del Pico Ocejón se encuentran muy cerca.
Y lo cierto es que son un auténtico espectáculo de la naturaleza digno de visita que se puede hacer a través de una sencilla ruta adecuada para toda la familia. Hoy te las descubrimos y te damos los mejores consejos para una excursión llena de encanto. ¡Comenzamos!
Índice
Chorreras de Despeñalagua, un espectáculo natural en la provincia de Guadalajara
Con sus 2049 metros de altitud el Pico Ocejón llama la atención no sólo por su majestuosa estampa en medio del Parque Natural de la Sierra Norte de Guadalajara, sino también por todos los tesoros escondidos que oculta. Desde preciosos y encantadores pueblos serranos esparcidos por sus laderas pasando por frondosos bosques o escarpados barrancos.
Es precisamente entre esos barrancos donde afloran un sinfín de pequeños arroyos que nutren de agua a los ríos Jarama y Sorbe. Estos pequeños arroyos reciben el agua del deshielo de las nieves del invierno además del agua de lluvia formando una auténtica maravilla natural que alcanza su máximo esplendor en primavera cuando varias cascadas se precipitan desde gran altura.
Es de esta manera como se forman la mayoría de los saltos de agua de la zona. Y entre ellos destacan las denominadas Chorreras de Despeñalagua, también conocidas como Chorreras de Valverde o cascadas de Valverde de los Arroyos, por estar localizadas junto a esta bonita población guadalajareña desde la que parte una sencilla ruta de senderismo a las propias cascadas.
Ruta a las Chorreras de Despeñalagua
Como bien hemos comentado, el mejor punto de partida desde donde empezar la caminata hasta el paraje de las Chorreras de Despeñalagua es Valverde de los Arroyos, orgulloso miembro de la asociación de Los Pueblos más Bonitos de España.
Esta pequeña localidad de poco más de 90 habitantes es un emblema de la famosa Ruta de los Pueblos Negros de Guadalajara, un conjunto de pueblos caracterizados por sus colores oscuros debidos a la pizarra y los singulares brillos de la piedra gneis, tan abundante en la sierra de Ayllón.
Y si bien hay muchos pueblos de este estilo en la ruta, sin duda Valverde tiene algo especial y resulta una visita imprescindible por ser ejemplo por excelencia de esta particular arquitectura popular serrana de los pueblos negros.
Así que, tras ver y disfrutar de la arquitectura local, ponemos rumbo en dirección a la zona de las eras donde hoy se localiza el campo de fútbol municipal. Desde esta localización, junto a un parque infantil con una gran zona con césped, comienza el sendero que lleva a las Chorreras de Despeñalagua.
El camino de ida y vuelta es de unos dos kilómetros de distancia y no presenta desniveles ni pendientes altas, configurando una ruta de senderismo fácil y de poca dificultad. No obstante, pese a que no es demasiado exigente, sí que conviene ir bien calzados ya que hay tramos en los que el camino tiene piedras por las que pueden llegar a bajar pequeñas corrientes de agua montaña abajo.
El comienzo nos lleva por un camino ancho con huertos y prados alrededor, estrechándose cada vez más en algunos tramos donde prácticamente caben poco más de dos personas al haber vegetación a ambos lados. Entre unas cosas y otra en poco más de 20 minutos divisaremos de repente a lo lejos la enorme pared desde la que se despeñan las cascadas de las Chorreras de Despeñalagua.
El camino ofrece la oportunidad de ir contemplando durante un buen tiempo las espléndidas vistas panorámicas tanto de la cascada como del entorno montañoso que las rodea. Aunque desde luego lo mejor está por venir y es la llegada hasta el mismo lugar donde el agua se precipita al vacío. Y es que la visión de los diferentes saltos de agua nos hará entender porque le llamaron «Despeñalagua».
Los más aventureros, tienen la opción (poco recomendable por otra parte por su peligrosidad y dificultad) de subir a lo alto de la cascada y tener una vista distinta del paraje. Esta alternativa implica subir por el camino de Majaelrayo y descender después a la vuelta por el camino que baja del Hervidero y que va a dar cerca de un soto de castaños. Si nos decantamos por esta opción habrá que sumar dos kilómetros más a la ruta.
¿Cuándo visitar las cascadas de Valverde de los Arroyos?
Lo cierto es que casi en cualquier época del año las Chorreras de Despeñalagua regalan un estupendo paisaje natural digno de admirar. Hay que tener en cuenta que en verano el caudal del agua será bastante menor, particularmente si ha sido un año de escasas lluvias, por eso lo más recomendable es hacer la ruta en primavera en la época de lluvias y deshielo. También puede ser buena idea ir en pleno otoño, aunque la cascada no será tan espectacular.
Durante el invierno también es una experiencia magnífica visitarla, pero hay que tener en cuenta que pueda estar helada, algo que aprovechan algunos aventureros para intentar escalar la pared completamente helada.
Recomendaciones para la visita
Además de Valverde de los Arroyos y sus Chorreras de Despeñalagua existen multitud de planes que hacer en la zona en un viaje por Guadalajara. No te pierdas encantadores pueblos y aldeas Campillo de Ranas, Majaelrayo, Almiruete, Campillejo o Umbralejo, todos ellos integrantes de los Pueblos de Arquitectura Negra caracterizados por el empleo de la pizarra y poseedores de un extraordinario valor etnográfico, arquitectónico y cultural.
¿Cómo llegar a las Chorreras de Despeñalagua?
Para llegar hasta la Serranía de Guadalajara es necesario tomar la autovía A-2 hasta justo antes de la ciudad de Guadalajara, donde tomaremos la CM-1008 hacia Humanes. A la altura de esta última población hay que desviarse por la CM-1004 hasta Tamajón, donde finalmente solo quedará coger la GU-211 que lleva directamente a Valverde de los Arroyos.
Una vez en el pueblo, la mejor idea es estacionar el coche en el aparcamiento habilitado cerca del cementerio, situado a un paso del sendero que lleva a las Chorreras de Despeñalagua.