Basílica de la Macarena, 70 años custodiando la Macarena
La Basílica de La Macarena es un templo neobarroco que, con su característica fachada blanca y amarilla, llama la atención de todo aquel que visita Sevilla.
Esta iglesia alberga en su interior el tesoro religioso más venerado de Sevilla, la Macarena, una magnífica imagen del siglo XVII que es la protagonista estrella de la Semana Santa sevillana. Hoy te descubrimos este singular templo, todo un orgullo para los sevillanos. ¡Empezamos!
La Virgen y la Basílica de la Macarena: parte indispensable de Sevilla
La Basílica de La Macarena, cuyo nombre completo es Basílica de María Santísima de la Esperanza Macarena, custodia una de las imágenes religiosas más veneradas por los sevillanos, la Virgen de la Esperanza Macarena, una imagen que durante casi tres siglos se guardó en la Parroquia de San Gil Abad, hasta que dicha iglesia fue incendiada el 18 de julio de 1936.
Conocida universalmente como «la Macarena», la imagen se alza con esplendor detrás del retablo mayor, adornado con una corona de oro, lujosas vestiduras y cinco broches de diamantes y esmeraldas en forma de flor donados por el famoso torero Joselito El Gallo.
La Virgen de la Macarena es toda una institución en la ciudad hispalense. De hecho, ha sido inspiración para poetas como Lorca, Machado o Alberti y es la patrona de los toreros y amiga de los gitanos. Cada Viernes Santo su imagen marcha en procesión por un camino de pétalos de rosa mientras miles de personas la vitorean, cantan canciones y alaban su belleza.
Si bien la autoría de la talla se ha atribuido a diversos escultores del siglo XVII, todavía no se sabe con certeza que artista la realizó. Muchos creen que se esculpió en el taller de Pedro Roldán, pero su autoría sigue siendo aún anónima.
Todos los sevillanos sienten una gran admiración por esta Virgen, recibiendo cada día cientos de visitas procedentes de todo el mundo. Y es que la fama de la Macarena va mucho más allá de Sevilla y España, ya que existen reproducciones de la talla repartidas por templos de todo el mundo, sobre todo en Latinnoamérica.
Historia de la Hermandad y la Basílica de la Macarena
La historia de la basílica de la Macarena es mucho más reciente que la de la Hermandad de la Macarena, cuya fundación data de 1595. Poco después, en 1624 salió por primera vez en procesión y en 1653, la cofradía se trasladó a la Parroquia de San Gil Abad. A lo largo del tiempo, la hermandad logró construir la capilla y el altar de la Virgen.
En 1892 la Reina Regente de España María Cristina de Habsburgo y Lorena ingresa como hermana mayor perpetua, motivo por el cual se consigue el título de Real Hermandad, además de notables favores por parte de la Casa Real.
El 18 de julio de 1936 la Parroquia de San Gil Abad sufrió un devastador incendio. Aunque la iglesia quedó reducida a cenizas, afortunadamente, se pudo salvar la Virgen de la Esperanza, ya que, ante la posibilidad de un incendio por la inestable situación del momento, había sido guardada en otro lugar.
Es en 1949 cuando, al fin, la imagen de la Virgen de la Macarena es trasladada hasta la recién inaugurada Basílica de Santa María de la Esperanza Macarena.
El estilo de la basílica de la Macarena
Declarada por el Papa Pablo VI Basílica Menor en 1966, la iglesia de la Macarena tiene planta basilical y fue diseñada por Aurelio Gómez Milán. Tiene una sola nave cubierta con bóveda de cañón y cuenta con cuatro capillas laterales. Fue concebida en estilo barroco andaluz, y el acceso se realiza por un pórtico con columnas de mármol en cuya parte superior se colocó una hornacina en la que ahora se ve una escultura que representa la virtud de la Esperanza. Y más arriba aún, una espectacular espadaña con cuatro campanas.
El interior de la Basílica de la Macarena está decorado con mármoles de varios colores y pinturas al fresco de Rafael Rodríguez donde la protagonista es la Virgen María. En el retablo mayor, se encuentra la talla de la Santísima Virgen de la Esperanza en un camarín cuya decoración es también una joya de orfebrería, firmada por Fernando Marmolejo Camargo. Y en las cuatro capillas laterales, se veneran las imágenes de Nuestro Padre Jesús de la Sentencia, la Virgen del Santo Rosario, el Cristo de la Salvación y las Patronas de Hispanoamérica.
Una visita al Museo de la Macarena
La Basílica de la Macarena de Sevilla también alberga, en el Museo de la Hermandad, el precioso ajuar de la Virgen de la Macarena, a través del cual se puede rastrear la iconografía de la talla. Se pueden contemplar batas procesionales y trajes donados por toreros, además de las famosas carrozas de la Semana Santa.
Y es que, históricamente, los matadores de toros han donado regalos a la Macarena con la esperanza de tener su protección en el coso. Joselito, por ejemplo, le entregó los cinco broches de esmeralda que adornan su talla y tuvo éxito en sus corridas de toros durante ocho años, hasta que fue corneado fatalmente en 1920, lo que provocó prácticamente luto nacional. Y hasta la Macarena se vistió de negro por primera y única vez en la Historia.
También se pueden ver, en el museo de la Macarena, algunos palios y algunos mantos, bordados la mayoría en terciopelo verde. En 1907 se realizó una candelería de plata y, en 1913, se bendijo la corona de oro de ley que le regaló la Hermandad.
Una Virgen, la de la Esperanza Macarena, que despierta pasiones y que ha merecido también la atención de compositores de la talla de Joaquín Turina (“Saeta en forma de salve”), Jacinto Guerrero (“Macarena”) o Quintero León y Quiroga (“Esperanza y Macarena”). Una Virgen a la que los sevillanos le dicen a voz en grito: “¡Guapa, guapa, guapa!”.
Cómo llegar a la Basílica de la Macarena
La Basílica de la Macarena está en el distrito Macarena, en la calle Bécquer, muy cerca de la calle de San Luis, en el norte del centro histórico de Sevilla. Las plazas de aparcamiento son escasas, así que lo mejor es que llegues o andando o en autobús. Hasta aquí llegan las líneas 3 de autobuses (parada de Macarena), la C2 y la C3.
Si tienes en tu agenda visitar la Basílica de la Macarena, te recomendamos que busques alojamientos en Sevilla y visites otros lugares que te sorprenderán como, por ejemplo, La Giralda, la Casa de Pilatos, la Torre del Oro o el Archivo de Indias.